La conmovedora historia de Karen, la joven curuzucuateña no vidente que terminó la escuela secundaria

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Karen Itati Leyes, de 19 años, en este 2019 termina sus estudios Secundarios en el Colegio Barnidio  Sorribes de nuestra ciudad. Hace algunos años Karen inicio sus estudios en la escuela Misia Antoñita Vasquez, luego en la Escuela 471 "16 de Noviembre".  Al principio aprendió a leer y escribir  con el sistema de Lectoescritura Braille. Actualmente, utiliza la tecnología de su computadora y teléfono.

La historia de Karen demuestra que nada es imposible, que no hay obstáculos en la vida si realmente uno quiere cumplir con sus objetivos. “Karen nació con una enfermedad de base, que no le permite ver, y a pesar de ello, con 19 años podemos decir que felizmente finalizó los estudios secundarios”, contó su mama, Gladys Pascua exclusiva con Radiofmtotal,

“Estamos muy felices de los logros obtenidos por Karen, estamos mas que orgullosos como padres, su hermano también la acompaña”, comentó y agregó:” La que se lleva todos los premios es Karen, por su esfuerzo, sus ganas, su voluntad, su afán de superarse constantemente, es más que admirable”.

A pesar de su condición Karen siempre tuvo el objetivo de estudiar y terminar sus estudios; nada ni nadie pudo apartarla de esa meta, al punto de que lo logró. 

“Ella concurría a Manos Abiertas, cuando empieza a manifestar sus ganas incansables de estudiar e ir a la escuela”, recordó emocionada Gladys. Allí, es que la contactan con la Escuela Rural “Misia Antoñita Vázquez”, donde cursó primer grado.

Luego completó la educación primaria en la Escuela N°471 en la ciudad. Por último, sus estudios secundarios los llevó adelante en la Escuela Secundaria “Barnidio Sorribes”.

“Ella tiene su maestra integradora  que la acompaña a clases, la ayuda con sus estudios y no la deja sola”, sostuvo. “Ella aprendió Braille y lo puede interpretar perfectamente, pero en la escuela se maneja con lecciones orales, y gracias a la tecnología de hoy, los textos que debe estudiar se lo traducen a un audio y con ello estudia a través del celular”, detalló Gladys.

Siempre acompañada por sus padres, y su hermano de 15 años, a Karen nunca le faltó ese apoyo para seguir adelante y no claudicar.

“Nunca le costó adaptarse al ritmo escolar, o al ambiente, ni a sus compañeros; de hecho siempre fue ella la que insistió para estudiar, nunca dejó de hacerlo, nunca se rindió y siempre dio lo mejor de si para obtener este logro”, admitió.

Pero los sueños de Karen no terminan allí. Según contó su mama, “sueña con ser profesora de inglés, le encanta el idioma y está convencida de hacerlo”. “Para ello, vamos a realizar una capacitación para que pueda nivelar su inglés, y luego ingresaremos al Profesorado de Inglés”, aseguró.